El parque recreativo La Sauceda, un sitio en conflicto y abandonado desde hace años en Hermosillo, será nuevamente concesionado por el Gobierno de Sonora. El anuncio público de la reapertura se realizará el 30 de abril de 2018 y la apertura formal, en una primera etapa, el mes de noviembre del año entrante. La segunda etapa se contempla para mayo y la tercera para el último trimestre de 2019.

Los detalles de la concesión administrativa son afinados por la Comisión Estatal de Bienes y Concesiones, que marca como regla principal:

“La concesionaria”, se obliga a edificar y operar y mantener abierto al público un parque recreativo en el inmueble concesionado, para lo cual se obliga a realizar una inversión que resulte estrictamente indispensable para poder ejecutar el proyecto ejecutivo presentado, asimismo, a partir de la entrega del presente Título, “la Concesionaria”, se compromete a presentar un programa de avance físico de obra y avances de inversión en un término no mayor de tres meses.

Asimismo, “La Concesionaria” tendrá derecho de cobrar por cada boleto de entrada al Parque la tarifa que de acuerdo a sus proyecciones financieras le permitan operar rentablemente el “Parque Recreativo La Sauceda”.

El plazo de vigencia del título de Concesión Administrativa es de 30 años contados a partir de la fecha de su otorgamiento. “La Concesionaria” gozará de un plazo de 5 años, previo al vencimiento de la concesión, para solicitar una prórroga hasta por el plazo que le fue otorgada originalmente, conforme a lo dispuesto por el Artículo 32 de la Ley de Bienes y Concesiones del Estado.

El Gobierno del Estado de Sonora, por conducto de sus representantes en este contrato, designa como su representante ante “la Concesionaria”, al Coordinador Ejecutivo de la Comisión Estatal de Bienes y Concesiones del Estado.

Esto es parte de los puntos principales de la nueva concesión de La Sauceda, cuyo anterior concesionario era Carlos Armando Félix Castro. Se ignora si en esta nueva etapa del parque repite como concesionario o si el bien se adjudica a un nuevo representante.