La mayor parte de la población sonorense, con su apoyo a Morena, votó en contra de Claudia Pavlovich, sus alcaldes, sus diputados, sus políticas. No hubo voto cruzado. La gobernadora perdió su bono democrático.

2018
Bisturí. La nueva Claudia
     

En la soledad de su despacho la gobernadora debe aún estar reflexionando sobre lo que se hizo mal para recibir el rechazo de la ciudadanía vía el democrático voto popular. La gente, como los antiguos guerreros espartanos, no preguntaba cuántos son sino dónde están. Y salieron a sufragar para emitir un voto irreflexivo cargado de coraje y a la vez de esperanza que les ofrece el caudillo moderno, con todo su estilo hitleriano, Andrés Manuel López Obrador.

La mayor parte de la población sonorense, con su apoyo a Morena, votó en contra de Claudia Pavlovich, sus alcaldes, sus diputados, sus políticas. No hubo voto cruzado. La gobernadora perdió su bono democrático.

En su manifestación silenciosa el pueblo pide un cambio también en Sonora. Y la gobernante estaría obligado a escuchar reclamos y proceder en consecuencia.


El primer paso es cambiar a una parte de sus colaboradores.

Principalmente sus operadores electorales que le fallaron.

La misma gobernadora debe modificar su estilo de gobernar.

Y olvidarse de los jilgueros que le cantaban y cantan al oído que ella solita derrotaría a las fuerzas enemigas.

La arrogancia y soberbia fue un factor importante en la derrota. Esas fueron las principales características de los operadores electorales que sin dinero nada son.

Sí, hubo derroche sin ton ni son.


Y cero resultados.

El colmo fue que muchos representantes de casilla del PRI abandonaron sus trincheras porque no les pagaron. Dicen que nada más en Hermosillo fueron unos 500.

El principal operador, Miguel Pompa, por dignidad debe renunciar a su puesto de Secretario de Gobierno.

Roberto Ruibal, el operador en Hermosillo, lo mismo. Ya debe muchas. Y siempre en escándalos de desvíos de dinero. Desde la campaña de Angelina Muñoz, pasando por la de Alfonso Elías, acumula puras derrotas.

¿Y para qué quieren perdedores?

Un ejemplo de la arrogancia y soberbia de los operadores, se registró en la misma sede partidista: En el segundo piso del PRI Sonora estuvieron los genios de la alquimia que conformaban el pomposamente llamado Comité Técnico Científico Electoral: Willy Alatriste, David Anaya, Axel Pascual Soto, Luis Carlos Soto, Amos Moreno junior. Y, claro, sus ayudantes.

Llegó la hora de los sagrados alimentos. La defensa de la patria podía esperar.

Así, todos bajaron a comer al salón Colosio. Se pidieron ricas viandas de Los Arbolitos, La Siesta y comida china de un restaurante de primera. El servicio, con todo y meseros. La acción debió haber sido una bofetada para Luis Donaldo.

Y para la perrada pidieron 300 hamburguesas norteñas.

Hay niveles, qué caray.

Por todos los medios la clase política ofendió al pueblo sonorense.

Ahora muchos de ellos se van.

Deberían ofrecer disculpas a los ciudadanos, por tanta ofensa.

Y prometer que cambiarán su forma de ser.

Ahora, Claudia a negociar los cambios.

Y cuidar sus espaldas con un Congreso a favor.

Si deja la gubernatura con una legislatura semejante a la actual, la muerte política.

El punto es que esa tarea requiere de mucho trabajo.

Y mejores operadores, así como un cambio de imagen.

La actual nada aporta y le resta mucha.

¿Veremos una nueva Claudia?

El tiempo, con toda su sabiduría, lo dirá.

A vuelo de pájaro

No todo fue gloria para Alfonso Durazo en Sonora.

Su hermana, Celia, ex candidata a alcaldesa de su tierra natal, Bavispe, perdió. Allí ganó el PRI.

Y mencionan al Pato de Lucas para volver a la Secretaría Estatal de Seguridad Pública. Su relación con Memo Hopkins, que se deterioró en el boursismo, ya volvió a la normalidad familiar. No hay que olvidar que Hopkins podría ser el enlace de Claudia Pavlovich con Alfonso Durazo. En ambos personajes habrá mucho poder.