El panorama social y político luce complicado para Claudia Pavlovich. Los casos conflictivos se acumulan y se siembran como artefactos explosivos que podrían detonar en el momento indicado, como por ejemplo previo al Informe de Gobierno. La percepción es que una “mano negra” podría estar meciendo la cuna.

2018
“La Fortuna”, nombre ideal en tiempos de bonanza
     

Bisturí.

El panorama social y político luce complicado para Claudia Pavlovich. Los casos conflictivos se acumulan y se siembran como artefactos explosivos que podrían detonar en el momento indicado, como por ejemplo previo al Informe de Gobierno. La percepción es que una “mano negra” podría estar meciendo la cuna.

Y no necesariamente tendrían que ser asuntos políticos.

Los de negocios son mucho más peligrosos.

Pero si ambos se mezclan sería una combinación explosiva.

La violencia y su rosario de muertes no hay quién la frene o medio contenga.

Gasoducto, acueducto y otros intereses que mueven algunos millones de pesos es el pan de cada día desde hace rato.

Y lo más reciente es la lucha de ejidatarios que claman por agua de la planta tratadora de aguas negras. Se suponía que el líquido ya tratado sería para los cultivos de estos agricultores.

Los del Ejido Villa de Seris ya hicieron su denuncia: Tienen en total 960 hectáreas pero por falta de agua utilizan 380 hectáreas. El agua no llega y los sembradores están desesperados. Aquí nada más se habla de 140 familias afectadas.

Pero hay más ejidos afectados por esta situación, ubicados al poniente de Hermosillo.

En este entorno de sequía se abren más hectáreas de riego de temporada en la Hacienda “La Fortuna”, propiedad, dicen, de Fausto “El Picudo” Pavlovich, uno de los mayores beneficiados en el actual sexenio. La Fortuna genera, obviamente, bonanza. Ya se compraron tierras aledañas, para completar unas mil 500 hectáreas. Acaban de cosechar garbanzo sin problemas de agua.

Los ejidatarios afectados piensan que toda el agua que les falta se va a “La Fortuna”, donde habría ganado fino, caballerizas y otros pequeños lujos.

En la rueda de la fortuna los que antes estuvieron abajo, hoy lucen felices arriba.

¿Qué es una reedición del pasado reciente?

Pueque.

Estariamos viendo una obra ya publicada.

El negocio de la basura

El próximo director de Servicios Públicos en el Ayuntamiento de Hermosillo, Norberto Barraza, ya advirtió a los sufridos hermosillenses que padecen un cochinero por casi toda la ciudad: En el próximo gobierno municipal, de Célida López, se podría cobrar por la recolección de basura.

El término utilizado fue el de una opción que se analiza.

Muy mal enfoque, porque habla de una privatización sui géneris: El Ayuntamiento como empresa.

Sería el colmo el cobrar por un servicio público que la autoridad está obligada a prestar.

Por qué mejor no se habla de aplicar en forma más honesta los recursos municipales. Y se hace un llamado a la solidaridad de la población que esté en posibilidad de hacer donaciones, temporalmente, mientras se arregla el problema.

Norberto sabe de estos problemas.

Está considerado como uno de los mejores jefes de servicios públicos que ha tenido Hermosillo.

Le falló la comunicación.

Algo muy normal en estos tiempos.

Y, mientras, Hermosillo se llena de basura y violencia.

Bueno, privatizar la recolección de basura y la seguridad pública sería otra opción. Qué tanto es tantito.