La confianza se refleja en su rostro optimista. Ya hace planes sobre el inicio de su precampaña a la gubernatura de Sonora. Será a finales de este año. Ernesto Gándara Camou personifica al político noble. No hay rencores ni revanchismos. Quiere construir alianzas ciudadanas dentro de su partido, el PRI.

El encuentro entre reportero y político se da en forma casual, en una de las mesas del restaurante del hotel familiar, el Gándara. Acaba de arribar de un vuelo procedente de la ciudad de México. Allí lo necesitaban para que firmara un documento. Tiene prisa porque aún no llega a casa, con su familia.

Pero se da tiempo para una breve charla informal. De entrada comenta que desea entregar su cartera como secretario de Asuntos Internacionales del CEN del PRI a la próxima dirigencia.

Para venirse a Sonora de tiempo completo. Se sobreentiende que para empezar su ruta hacia la candidatura a gobernador, por su partido de siempre, el PRI.

Al respecto, el popular Borrego esboza una sonrisa. Y aclara: No voy por otro partido. Aquí mismo se escribió que en el escenario político se abría una posibilidad: Qué Ernesto Gándara fuera postulado por Morena para ser su candidato a gobernador, por su amistad con Alfonso Durazo.

Alfonso y yo somos amigos. Conservamos lazos de amistad, pero esa posibilidad no entra en los planes, sostiene el ex alcalde hermosillense.

Retoma el asunto de su próxima precampaña: Aún es temprano, no es tiempo. La gente se cansa.

¿Y el precandidato también?, revira el reportero.

Claro, también.

La dirigencia nacional del PRI está por renovarse. Y en su seno se seleccionará al próximo candidato. Los aspirantes están muy identificados ¿Pero quién sería el idóneo para tu proyecto?

Tengo muy buenas relaciones de amistad con todos. Si te refieres a quién puede ser, para mí está entre Alejandro Moreno Cárdenas (Alito, gobernador de Campeche, identificado con abrir el proceso hacia la militancia) y José Narro Robles (ex rector de la UNAM, ex secretario de Salud, identificado con los grupos fuertes del PRI, como los de Enrique Peña Nieto y Carlos Salinas de Gortari).

Pero los resultados de este proceso, aclara el precandidato Gándara, no me preocupan.

Bueno, se le inquiere, las relaciones con la cúpula deben ir acompañados con trabajo en las bases. Al respecto, ¿ya están trabajando los grupos afines a tu proyecto?

A lo largo y ancho del territorio sonorense.

¿Y sobre Ricardo Bours, tu aliado, qué puedes comentar?

Él tomó su decisión. Me extrañó, pero se respeta su decisión.

¿Podrían hacer alianzas?

Aquí lo importante es hacer alianzas con la ciudadanía, formar fuertes bloques, construir fortalezas.

La breve charla termina. El político ya quiere estar con su familia. La despedida, como siempre afectuosa. Y el mensaje sin palabras: Voy con todo. La tercera es la vencida. Su revolución iniciaría en noviembre, con el sello de la tradición priista por excelencia. El cuerpo de oficiales ya tiene a la tropa cavando trincheras. Hay que estar preparados cuando el sonido de la trompeta llame a zafarrancho de combate.